martes, 24 de abril de 2012

Reflexión gracias a "mi" chico de prácticas

Hace ya unos días que tengo un chico de prácticas en clase. Es un chaval que se ha incorporado tarde, con una pierna rota y que hoy, fruto de las fiestas de su pueblo, ha aparecido con una brecha en la cabeza. Vamos, que, en principio, da miedo. Pero se le ve disfrutar en clase y eso me gusta: se lo pasa bomba con las abejitas y creo (y él dice) que está aprendiendo. La verdad es que no quería hablar de él, sino de cómo su presencia en el aula me está haciendo plantearme mi propia práctica docente.

Pasar tiempo con Jorge y tener que verbalizar cosas que yo hago como rutina me hace ver qué hago, cómo lo hago y por qué lo hago.

  1. ¿Qué hago? Doy clase, intento enseñar cosas, pero, sobre todo, procuro que mis chicos sean felices y sonrían, que desarrollen sus potenciales y compartan con sus compañeros. El mundo, si queremos que siga siendo mundo, pasará por la colaboración y el aprendizaje compartido.
  2. ¿Cómo lo hago? Trabajando mucho y dando libertad. Trabajo porque organizar el aula y su funcionamiento de una forma diferente a esa que nos enseñan y en la que nosotros hemos sido enseñados no es fácil, trabajo porque cada día tengo que reinventar las cosas que hago. Y doy libertad, porque el ser humano es libre, y es tan libre como lo son los demás, así que enseño respeto, compartir, valores...
  3. ¿Por qué lo hago? Porque intento ser maestra, intento construir un mundo nuevo educando de una forma diferente.
Y ahora, el reto: conseguirlo. No sé si lo hago bien o mal, pero sí sé que lo intento con todas mis fuerzas.

Sólo por todas estas cuestiones (y muchísimas más que me dejo en el tintero) vale la pena tener a alguien de prácticas en quien vernos y a quien explicar (en la medida de nuestras posibilidades este camino que sólo se diseñó para los soñadores. Estoy orgullosa de mi gremio: los MAESTROS y MAESTRAS

miércoles, 4 de abril de 2012

Las notas

Hoy he dado las notas, esas cuadrículas horrorosas donde catalogamos niñ@s, ilusiones, saberes (¿?)... Y siempre me queda el amargo regusto de si lo habré hecho bien. ¿Y si uno de los que lleva un INS en inglés se lleva una torta por mi culpa?

Claro, a lo mejor la pregunta es por qué lleva un INS y no un SUF. Si esa es la duda diré que por comparación con sus compañeros: no por una relación con unos contenidos mínimos, sino por una relación con sus iguales respecto de esos contenidos. Qué difícil me resulta explicar lo difícil que es poner notas. Quizá por eso os diré que me tiro días enteros escribiendo, redactando, unos informes larguísimos de cada una de mis abejitas.

Unas notas... unas cuadrículas, unos papeles. Qué difícil es cuadricular a las personas cuando el corazón nos hace valorar tantas otras cosas...

domingo, 1 de abril de 2012

Corto y recorto

Y mientras ellos (esos entes) cortan y recortan, nos quedamos los que vivimos una vida normal, con un trabajo normal (si educar es normal, que no lo es puesto que exige dedicación, amor y poner tu vida al servicio de...) y un sueldo normalito viendo cómo toman decisiones que nos afectan a tod@s: cortes en defensa y REcortes en educación y dependencia.
¿Por qué diferencio entre los cortes y los REcortes? Porque un 8% es mucho, pero un 20% o un 100% es más. Y, además, establece, de forma muy clara y muy precisa, cuáles son las prioridades de esos entes: no somos nosotr@s, los de la vida normal, el trabajo normal...

Y mientras tanto, sólo pongo un ejemplo, en mi colegio hay una baja de una tutoría compartida (3º y 4º juntos) sin cubrir desde hace un mes. Valladolid no la autoriza. ¿Tendremos tutor/a sustituto para la vuelta de vacaciones? Y si no, ¿quién se responsabiliza de ese alumnado que está sufriendo el que cada hora entre alguien diferente a ver cómo rellena el hueco? Tendremos que cambiar horarios y reestructurar la vida escolar. Pero que nadie pida milagros. No son sólo los entes quienes hacen cosas mal: hay demasiada falta de compromismo por los centros, demasiada gente que no quiere responsabilidad y que no se hace cargo de que a esos chavales también hay que sacarlos adelante como si fuese nuestra propia tutoría. Que somos MAESTR@S, de los que tienen una vida normal, un trabajo normal...